A la hora de ponerte a "Hacer": ¿eliges o decides?

Parecen sinónimos pero hay una diferencia clara entre estas dos acciones.
  • Elegir: Escoger o preferir a alguien o algo para un fin.
  • Decidir: Formar juicio resolutorio sobre algo dudoso o contestable.
Decidir es pararse a pensar para poder tomar una respuesta consciente sobre algo. Elegir en cambio se hace de forma intuitiva, casi constantemente estamos eligiendo, no decidiendo qué hacer, sería un gasto inmenso para nuestro cerebro.

Cuando ahora hablamos de ponernos a <<hacer o ejecutar>> lo mejor es pensar y decidir sobre las acciones pendientes cuales son las que por restricciones o posibilidades pueden hacerse y de entre ellas cual te aporta más. 

Y sabemos que la toma de decisiones depende de la calidad de la información que utilizamos para tomarlas. Es por esta razón por la que GTD aporta un gran valor a tu calidad de toda de decisiones, pues hemos llegado hasta el punto de <<ejecutar>> cuando previamente hemos pensado y decidido (este es el 2º paso: aclarar) sobre todo lo que ha entrado en nuestras bandejas de entrada.

En GTD para ponerte a ejecutar, previamente has pasado por estos pasos previos parándote y pensando:
  1. Hemos capturado "algo" que ha llamado nuestra atención: ¿qué significa eso para mí?
  2. ¿En necesario hacer algo?
  3. Si realmente es necesario ¿cuál es la siguiente acción física y visible para llegar al resultado final que quieres conseguir?
  4. ¿En qué contexto la organizas para poder llevarla a cabo?
Piensa en todas las cosas que tienes pendientes por hacer... Es normal que muchos piensen que GTD supone un esfuerzo extra de trabajo, pues como ya he comentado antes, hace falta parar y pensar. Y obviamente es un esfuerzo, porque no estamos acostumbrados a parar y menos a pensar. 

Sin embrago siguiendo estos pasos y dedicando tiempo a aclarar nuestras bandejas de entrada, estarás consiguiendo mejorar tu toma de decisiones, pues no solo dispondrás del listado de las cosas que te has comprometido a hacer, si no que previamente todas ellas ya las has aclarado y organizado, pudiendo poco a poco ganar confianza y mejorar tu poder de decisión, si no que también mejorarás tu intuición; algo que probablemente no sabías que podías mejorar. Es otra de las similitudes que hay entre GTD y el Yoga.



Comments